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Como sea, por más que la suerte influya, no es como para perder US$525 mil y menos cuando tal suma ni siquiera te pertenece, sino que proviene de la empresa donde trabajas.
Es el caso de una mujer australiana, quien fue acusada de tal hecho, el cual ya ha confesado, revelando una ludopatía crónica. Todos sabemos que la ludopatía puede causar estragos en la vida de las personas, pero rara vez llega a tal punto.
La mujer inicialmente se irá a la cárcel por 18 meses, pero puede que el juez le baje la sentencia a 12 meses o hasta puede que sólo la condenen a arresto domiciliario. Si se establece que los delitos se debieron a una enfermedad, puede que no tenga que pagar nada para reparar parte de los daños.
Sin embargo, será sumamente complicado para la afectada volver a conseguir un trabajo en el futuro, sin contar que jamás podrá acercarse a un casino siquiera un tragamonedas en su vida.